Yo sé que no debo ser el primero que postea algo sobre esto, pero no puedo dejar de hacerlo.
Caminando por la calle se acerca un chico de traje y corbata y me da la siguiente tarjeta:
Además de las múltiples reflexiones que merece el mail @gmail.com (esperaría un dominio propio y que identifique a los responsables), me pregunto yo:
¿cuànto tiempo habrà pasado el que me dio la tarjeta laburando en su casa, juntando dinero y desarrollando su éxito (el cual dependió sólo de Él) hasta que se cansó, largó todo y decidió ir a repartir tarjetas a la calle?
No hay comentarios:
Publicar un comentario